
El ciclo se presentó ayer en el Ayuntamiento.
El ciclo se presentó ayer en el Ayuntamiento.
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Jorge E. García Ortega - dirección
Sandra Massa Santos - órgano
El concierto que ofrecerá el Conjunto Vocal e Instrumental Virelay el 18 de noviembre será dirigido por Lluís Vilamajó, actual director del Coro Barroco de Andalucía.
Obras de: Josquin des Pres, Jacques Arcadelt, Francisco Guerrero, Tomás L. de Victoria, Orazio Vecchi, Claudio Monteverdi y dos anónimos de los siglos XV y XVII. Coros: La Stigia , de Salamanca, y Virelay, de Cádiz. Directores: Antonio Santos García y Jorge E. García ortega, respectivamente. Lugar y fecha: Oratorio de San Felipe Neri. Domingo, 22 de abril de 2007. Aforo: 60 por ciento.
JUAN ANTONIO CASTAÑEDA
Diario de Cádiz, 24-04-07
En efecto, un magnífico concierto de música vocal que alternó lo religioso con lo profano y que hizo las delicias del público que asistió el domingo al Oratorio de San Felipe a escucharlo. Eso además de un programa que se confeccionó con la música de seis autores escogidos de entre lo más granado de la época renacentista; la de un pasado en el que, conviene recordarlo, España brilló con luz propia a través de Tomás Luis de Victoria, Cristóbal de Morales, Francisco Guerrero, Antonio de Cabezón, y hasta un largo etcétera. O la que lucieron vihuelistas de la talla de Luis de Milán, Luís de Narváez, Alonso de Mudarra, y hasta un largo etcétera también. Un brillo el de entonces que no hemos vuelto a tener a pesar de la música de Falla, Granados, Albéniz, y demás músicos españoles.
Hay algo que nos gana de estas corales. El tesón, la grandeza de una vocación que une a unos jóvenes en torno a la música sin otro interés ni afán que el puro amor a ella. Gratifica comprobar cómo van cubriendo etapas y cómo la calidad y la perfección van dejándose sentir en su labor. Calidad y perfección que no faltaron en este recital en el que se plasmaron la mayoría de las formas y los estilos renacentistas. Así, en lo religioso, le escuchamos al coro La Stigia, los motetes In te Domine Speravi y Tu pauperum refugium con la autoría de Josquin des Pres, el que fuera el más destacado músico de la polifonía flamenca de su tiempo. No faltó ni rigor ni esmero en la ejecución de las dos páginas, aunque en cuanto a empaste y homogeneidad sonora nos quedaríamos con los tres anónimos del siglo XV que siguieron, llenos de remansos expresivos y de sobrecogedores pianísimos: al Dindirindin nos remitimos.
Por su parte el coro Virelay, de Cádiz, nos ofreció la Missa Quarti Toni de Tomás Luis de Victoria; bella partitura de la que se hizo una magnífica lectura que dejó ver en todo momento ese algo que va más allá de las notas del pentagrama cuando éstas, aún meros sonidos, se sustancian en sentimientos, esto es, en música; obra fruto de una sobriedad clásica y de un equilibrio melódico perfecto. Para el recuerdo queda su Kyrie. Siguió el coro Virelay con cuatro obras profanas de Francisco Guerrero que la falta de espacio nos impide detenernos en ellas, pero que mantuvieron el nivel que se había alcanzado con la misa.
Vaya nuestro aplauso a los dos coros y muy en especial a sus respectivos directores: Antonio Santos García y Jorge E. García Ortega.
Sábado, 23 de diciembre. 20 h. Capilla de las Hnas. Reparadoras (c/Zaragoza), Cádiz. Concierto dedicado a las Religiosas de María Reparadora. Por fin lo dimos. Concierto navideño muy digno de Virelay, disfrutado en buena medida por nosotros, ¡que al público le gusta eso, repámpanos! Por no decir ¡Cáspita! u ¡Oh sí sí! No fueron tan sonreídas como en Servitas las intervenciones de nuestro director, pero el coro estaba como en su casa, no en vano, cantamos en el convento donde ensayamos habitualmente. Los asistentes respondieron muy bien con sus aplausos y calor. Deporte de riesgo, al menos para mí, haber cantado el "Va pensiero" con tan poco tiempo para prepararlo. Pero ahí es donde damos el callo los virelayos :) ... y además fue un bonito homenaje. Habría estado bien una bufanda para los hombres o un gorrito de Papá Noel para todos, con lo que habríamos matado dos pájaros de un tiro: hacer algo especial por la navidad y alegrar un poco el sempiterno negro del uniforme. Tras la cena navideña pasamos un rato muy divertido. No podía ser menos, con unos amigos invisibles tan inspirados. Sandra fue elegida la flamante virelaya del año y también fue la más regalada. Sólo faltó darle un Óscar... pero bueno, como ya tiene un Jorge... JA, JA. Anita y yo también aportamos nuestro granito de guasa con un romancero navideño carnavalesco, no exento de maldad y cierto revuelo. Gracias compañeros, por compartir esta "parida". Nosotros también nos reímos mucho haciéndola :) Respecto al CD de video que está a la venta, lo he visto y es magnífico. Siento alegría, emoción y pura música, y todo eso somos. Tampoco puedo ocultar el orgullo de pertenecer a un coro que hace de la música antigua algo tan vivo y vibrante.
Y al jueves siguiente, cogimos un autobús y nos fuimos de excursión. La repetición del repertorio V Aniversario fue maravillosamente acogida por el público cordobés, un público selecto, bien enseñado como alguien comentó, que no aplaudió hasta el final del todo. Ya fuera de programa, tras interpretar el Ave Verum de Mozart y el Canticorum, nos dimos a la fuga… es decir, que repetimos la fuga del Te Deum.
Durante el viaje de ida, Javi ejerció de guía turístico, y Adela nos guió en la cocina cordobesa durante la cena que, por cierto, estuvo muy buena y variada, y en la cual los virelayos establecimos un mayor contacto con los músicos, si cabe… en el buen sentido (¡¡Anita, te echamos de menos… sniffff!! )
Y bueno, poco más que contar, el viaje de vuelta en autobús fue “typical choralist”. Amenizado con cantos de villancicos, motetes y algún que otro bis del concierto ( ¡¡por favor, más nooo !!) se sumaron también, cómo no, los carnavales de Cádiz, los cantes aflamencados, ¡y hasta por Pasión Vega! Hubo variedad y se puede decir que casi llovió a gusto de todos… ¡ah! y se me olvidaba… también dimos un concierto en la Iglesia de la Magdalena.
El conductor estaría de nosotros hasta el nácle, ma non troppo.
PD.- Lo dejo claro: no me llevo más la guitarra.
Sábado. 21 de octubre. A las 21:00 todo eran nervios. Con un sincero “gracias” de Jorge comenzamos a salir. Fuimos conscientes que el Oratorio estaba repleto, mientras la gente aplaudía. Desde que en Octubre de 2001 se creara “de las ruinas de un continente perdido” Virelay ha crecido en número de integrantes, exigencias, calidad y metas. Si bien su “Patrón” es Francisco Guerrero, cientos son los compositores a los que el coro ha recordado en estos cinco años de vida. Y son los más importantes para ellos los que han merecido formar parte del concierto “V Aniversario”.
El programa, de lo más variopinto, recoge la historia del conjunto. Podréis verlo en los archivos de nuestra trayectoria.
Además, Ave Verum Corpus de Mozart y Canticorum Iubilo de Haëndel fueron sus “bises” arrancando verdaderos aplausos y sonrisas de satisfacción tanto a los asistentes como a los propios integrantes de la agrupación.
Tras el concierto, Félix–Iván Martínez leyó una carta en agradecimiento a Jorge E. García y Sandra Massa por su labor como directores y como personas, que han hecho de Virelay una realidad. Se les hizo entrega de un álbum con un collage de la historia
del grupo.
Pero la fiesta no acabó ahí. Una deliciosa cena en “La Montanera” con Romancero incluido por cortesía de Jesús Moreno y Javi Orellana, y para los más fiesteros, unas copas en el pub Irlandés de la calle Sagasta: UN GRAN FIN DE CUMPLEAÑOS.
MUCHAS FELICIDADES, VIRELAY!!